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Las escuelas que siguen pedagogías activas están cada vez más solicitadas. Hace algunas semanas, los medios se hicieron eco de la plataforma creada por un grupo de familias de Barcelona para reclamar una mayor oferta educativa en escuelas no directivas, tras haberse quedado sin plaza para este curso. Un caso similar es el de las familias que ya han probado este tipo de educación y quieren que sus hijos puedan continuar los ciclos superiores siguiendo la misma línea pedagógica, como ha ocurrido en el CEIP Nou de Quart (Girona) y en la Escuela Infantil El Tomillar de Torrelodones (Madrid).
Muchas de las familias que deciden matricular a sus hijos en la Escuela Infantil El Tomillar lo hacen atraídas por su proyecto pedagógico, basado en el constructivismo. Para otras, es simplemente la escuela que les ha tocado, y antes de pisarla, no habían escuchado nunca hablar de conceptos como aprender a aprender, proyectos, rincones, juego heurístico... Sin embargo ahora, unas y otras se han unido para constituir la asociación EducActivos. “Buscamos metodologías y pedagogías alternativas e innovadoras que se adapten a las necesidades de la sociedad del siglo XXI, que permitan realizar un aprendizaje significativo para el niño”, explica Luciana, una de las madres que participa en la asociación. Las ventajas para ella son evidentes “proporcionan a los niños un papel más activo en su educación, fomentan su creatividad, su curiosidad, su autoconocimiento, el desarrollo de sus talentos y pasiones e incentiva su pensamiento crítico”.
El propósito de los miembros de EducActivos es conseguir que sus hijos puedan continuar la primaria en una escuela que también apueste por el constructivismo, pero ahora mismo en Torrelodones no existe esta opción. Por eso, desde la asociación se está reclamando que se construya un cuarto colegio público de educación primaria donde se siga esta línea. En principio, las perspectivas eran halagüeñas, ya que los presupuestos de la Comunidad de Madrid para 2016 ya contemplaban la construcción de un nuevo centro público. Sin embargo, ahora mismo el proyecto se encuentra parado. “Nuestros niños año tras año tienen numerosas dificultades para acceder a un colegio de primaria. En la actualidad, nos encontramos con unas ratios inadecuadas y unos espacios que no son aptos como aulas (bibliotecas, salas de música o de informática)”, denuncian desde EducActivos.
En el caso del Nou de Quart, un colegio público de educación infantil y primaria, la demanda de las familias es poder mantener la coherencia pedagógica a lo largo de toda la etapa obligatoria. Para ello, la propuesta es la creación de un instituto en la localidad, que ahora carece de centros de secundaria. A diferencia de otros colegios públicos innovadores, basados el el aprendizaje por proyectos, en Quart se siguen las técnicas Freinet. Laura, una de las portavoces de la Plataforma per la Continuïtat al 9d4t, las resume así: “Freinet toma al niño como centro de la obra educadora, da la palabra al niño sobre su aprendizaje. Esto quiere decir que su aprendizaje se construye a partir de sus intereses, capacidades, vocabulario, conocimientos y entorno vital.” Además de técnicas y dinámicas que son comunes a otros proyectos innovadores, como experimentación, cálculo vivo, talleres, ambientes y asambleas, el método Freinet hace hincapié en el compromiso que semanalmente adquiere cada alumno con su aprendizaje, a través del plan de trabajo. En el plan, figuran varias actividades correspondientes a distintas áreas, de las cuales el alumno podrá elegir las que más le motiven, siempre que haya al menos un par de cada asignatura. Al finalizar la semana, el alumno se autoevalúa, explicando qué actividades le han resultado más interesantes o qué le ha costado más esfuerzo, para luego comentarlo con el profesor, que también realiza una evaluación. Este plan de trabajo se sigue incluso en infantil, donde los alumnos que aún no escriben, valoran las actividades con colores. No hay pupitres ni tarima, sino mesas para poder trabajar en grupo, y los niños pueden moverse libremente de un aula a otra, dependiendo de la actividad que haya decidido hacer.
Plan de trabajo de un niño de P5: el lunes, él mismo elige las actividades que realizará a lo largo de la semana, con la condición de que seleccione al menos una de cada ámbiente (para atelier puede elegir entre grabado en bandejas de porexpan o arte libre; para laboratorio, descomposición del número 7 o sudoku...). Cuando las acaba, las valora con colores. El profesor también valora el trabajo realizado y hace recomendaciones.
La escuela abrió sus puertas hace nueve años, debido a que el único colegio que existía entonces en Quart necesitaba dar cabida a una nueva línea de P3 pero no contaba con espacio. Las primeras familias que llegaron al Nou de Quart no tuvieron por tanto elección, ni eran conscientes de que se trataba de un centro diferente y en un principio, hubo padres y madres que mostraron su desacuerdo frente a una enseñanza tan distinta a la que ellos habían recibido. Ahora sin embargo, después de haber podido comprobar por sí mismos sus ventajas, el 80% de las familias apoya la creación de un instituto-escuela en el que poder continuar con la misma metodología y el colegio se ha convertido en un referente en la provincia de Girona. Muchas padres y madres de localidades cercanas querrían poder llevar allí a sus hijos, pero ahora mismo la escuela está tan demandada que es muy difícil conseguir plaza.
El interés por remodelar la escuela pública es mínimo, mientras que las escuelas concertadas sí reciben dinero público para implementar distintos proyectos educativos.Laura defiende que el modelo educativo debe cambiar y que los cambios deben llegar a todos, no sólo a quienes puedan pagarlos. “Me remito a las conclusiones que se extrajeron de la mesa redonda, organizada por la plataforma y con expertos de distintos ámbitos, para la reflexión sobre la situación y futuro de la educación pública. Todos coincidieron en que el modelo actual, basado en la transmisión de contenidos está caducado y que no da respuesta a los retos que la sociedad tiene actualmente. Destacaron que es necesaria una administración más cercana, más local y menos rígida que apueste de forma real por una escuela pública de calidad, universal e inclusiva. Como hemos comprobado, por parte de la administración el interés por remodelar la escuela pública es mínimo, dotándola de escasos recursos, mientras que las escuelas concertadas sí reciben dinero público para implementar distintos proyectos educativos”. De momento, la plataforma sólo ha obtenido el apoyo del ayuntamiento, “por parte de la Conselleria d’Ensenyament sólo hemos obtenido un rechazo sistemático de las propuestas planteadas”. Lo que sin embargo, no ha desanimado a las familias de la plataforma, que tienen claro que no pararán hasta obtener una respuesta satisfactoria. Algo en lo que coinciden con EducActivos, que afirman lo siguiente “Seguiremos en este camino hasta que consigamos una educación acorde con las necesidades educativas actuales” Su declaración de intenciones -que puede leerse ampliada en su web-, no deja lugar a dudas:
1º Lograr que las instituciones públicas nos ofrezcan una alternativa pedagógica de carácter público al modelo educativo tradicional y conseguir que dicha alternativa pedagógica sea promovida en los centros educativos de nuestra Comunidad.
2º Provocar la reflexión sobre la realidad del paradigma educativo existente. ¿Está el modelo educativo convencional en consonancia con el mundo en el que vivimos?
3º Invitar a ser partícipe del cambio social que se está gestando en todo el país y en el mundo a través de diversas innovaciones pedagógicas, diferentes escuelas alternativas, movimientos, asociaciones e iniciativas ciudadanas
4º Garantizar a nuestros hijos un futuro mejor, lleno de ilusión, de esperanza, una escuela llena de emociones, de disfrute, de acción, experimentación, de juego, una escuela que incluya la diversidad, el pensamiento creativo, las distintas expresiones artísticas, el respeto y el cuidado por el planeta. En definitiva, una escuela que contribuya al desarrollo integral de nuestros hijos e hijas, respetando el ritmo individual de cada uno, el derecho a jugar y relacionarse con los otros, el derecho a ser valorado por lo que cada uno es y no por la eficacia de sus producciones, derecho a elegir, a disentir y a ser guiado en el uso adecuado de su libertad. ¡Derecho a ser niños!
Las propuestas son claras. Ahora está por ver si las administraciones serán capaces de estar a la altura de los objetivos de las familias, así como de dar un contenido real a su derecho de poder elegir para sus hijos la educación que consideren más adecuada.