Moma Nature Montessori es una escuela de 0 a 6 años, con fuertes cimientos en la pedagogía Montessori y abierta a todas las pedagogías activas capaces de ayudar a nuestros niños a aprender y crecer. La pedagogía Montessori y las pedagogías activas están basadas en el hecho de que un niño es una persona de pleno derecho, con sus gustos y una personalidad propia; por eso él mismo es el protagonista de su aprendizaje. Generamos seguridad, confianza, y ánimo para explorar y crear, desarrollando la fortaleza de nuestros niños, siempre con el máximo respeto hacia él o ella como individuo en ese momento tan especial de su vida. Nuestras guías siempre tratan a cada niño como único, trabajando para inspirar su curiosidad natural y permitirle prosperar como ciudadano del mundo: independiente, curioso, analítico y solidario.
Los ambientes de nuestra escuela son los principales lugares de interior para el desarrollo de trabajos y talleres, están cuidadosamente preparados y ordenados, y son seguros, cómodos, bonitos y llenos de luz. Nuestros niños y niñas tienen libertad de movimiento entre ellos, lo que fomenta su independencia y autonomía. Nuestro ágora es nuestra plaza central, un espacio diáfano y lleno de luz que nos sirve tanto para viajar a Marte, como para hacer yoga o debatir sobre el clima.
La parcela en la que se encuentra nuestra escuela supone 1.000 m2 de jardín natural que, alineado con el clima de la zona y el bosque del entorno de la cuenca media del río Guadarrama, está detalladamente dirigido a la exploración, juego y aprendizaje de cada niño. Él o ella ayudará a cuidar el huerto, hará flanes de arena en nuestros areneros enormes, y experimentos científicos con materiales que se encuentra en el jardín. Nuestro bosque, nuestro huerto, y nuestro medio ambiente natural son un aula más.
Estamos absolutamente determinados a revertir la tendencia a separar la elaboración del alimento del consumo del alimento. Tenemos el absoluto convencimiento de que, siendo la alimentación una necesidad básica de los seres vivos, que nuestros hijos e hijas entiendan la producción y elaboración de alimentos, crea personas fuertes, conscientes de sus capacidades como individuos creativos y creadores, acercándoles la naturaleza más básica, que les dota de todos los materiales necesarios para darse a ellos mismos una alimentación cercana, sana y sabrosa.
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