El Cole en Casa lleva funcionando ocho maravillosos años. Donde el objetivo principal fue defender el derecho del niño y niña a permanecer en un hogar durante los tres primeros años de su vida.

Educadora infantil y maestra de primaria, apoyada e influenciada por las ideas de Rudolf Steiner, empiezo a funcionar como Madre de Día. Creando la primera Asociación de Madres de Día en Valencia. Después de dos años funcionando, fueron las propias familias las que me alentaron y pidieron llevar el proyecto hasta edades de seis años. Y así fue como nació el Cole en Casa.

En nuestro cole aprendemos los unos de los otros, de nuestros errores y fracasos. Crecemos como personas felices y disfrutamos en el proceso de desarrollo. Cada uno y una siguiendo nuestro propio ritmo, desplegando nuestra propia individualidad, con ayuda de nuestros talentos y apoyándonos en nuestras dificultades.

Tratamos los límites como la herramienta para definir nuestro espacio, en el cual, se puede actuar con independencia y libertad y, en el cual, se puede dar un verdadero desarrollo humano. Los límites no limitan el ser de otro, sino, por el contrario, sirven para mantener el entorno relajado de manera que todos y todas nos sintamos cómodas en él.

Las familias tienen un papel muy importante y activo en todo el proceso y, entre todas las familias, construimos la nuestra propia. Se organizan encuentros mensuales, talleres, cuenta cuentos... El Cole en Casa es un hogar más donde compartir experiencias, un espacio de asesoramiento e intercambio social a las familias.

Gozamos de un gran espacio al aire libre, con nuestro huerto, nuestros árboles frutales para poder subirnos y recolectar la fruta. También tenemos un espacio cerrado donde guardamos el material, lo llamamos "el cole" pero en realidad el cole es todo. Es la casa, donde cocinamos y comemos juntos. Donde vamos al baño cuando tenemos ganas de hacer pipí, o nos tumbamos en la habitación para descansar un poco. Son las terrazas, donde extendemos una manta y contamos cuentos, o mejor, nos vamos a la zona del teatro y los representamos. Es como en nuestra propia casa, porque de eso se trata, de crecer en una casa, con la suerte de compartir con otros hermanos de diferentes edades, un grupo pequeño y hogareño. Es la casa de Inma, un miembro más de la familia.

Terapeuta Infantil, también trabajamos los Reflejos Primitivos en el día a día del cole.

Desde la vida intrauterina y durante el primer año de vida, el bebé realiza movimientos reflejos adecuados para estas etapas. Dichos reflejos se irán inhibiendo para dar paso a los reflejos posturales, los cuales son necesarios para nuestra estabilidad y equilibrio y así nos permite movernos automáticamente ya sea gateando, caminando o corriendo.
Si los reflejos primitivos se quedan activos el niño o niña no desarrollará este control automático del equilibrio y muchos aspectos del aprendizaje pueden verse afectados.

La Terapia de Movimientos Rítmicos se basa en la repetición de los movimientos naturales que hacen los bebés de manera espontánea. Su eficacia la hace aplicable en el tratamiento de diversas patologías.

Pero lo mejor para conocernos es que vengas a vernos, estaremos encantadas de enseñarte nuestra casa.