Hemos crecido soñando con tener la fuerza de Pippi Långstrump, la imaginación de Alfons Åberg o la dulzura de los Mumin, y por eso sabemos toda la diversión y sabiduría que encierran los libros infantiles del norte de Europa.

Queremos que los niños y niñas puedan divertirse, emocionarse y hacerse preguntas con los libros. Nos gustaría que estos sean espejos y ventanas para ellos y ellas; espejos que les permitan identificarse con los personajes que habitan en nuestros libros, y ventanas que les asomen a la vida de otras personas. Lo mismo que la buena literatura ofrece a los adultos.

Creemos en una literatura infantil que habla de todo y confía en la inteligencia fresca y en la curiosidad que se posee en la niñez. Pero, sobre todo, ¡queremos hacer que los niños y niñas disfruten de los libros!